Una ciudad inteligente debe utilizar el agua más de una vez

“A medida que las ciudades sigan creciendo, tendrán más demanda de agua en muchos sectores: residencial, industrial, ecológico”, dice el hidrólogo Enrique Vivoni.

Casas flotantes en aguas bajas en el lago Oroville el 25 de julio de 2021, mientras empeora la emergencia por sequía en California.
Por Chris Malloy
03 de agosto, 2021 | 05:02 PM

Bloomberg — A lo largo de la historia, las ciudades siempre se han esforzado para garantizar el agua. Los romanos construyeron acueductos, los mayas desarrollaron cámaras de almacenamiento subterráneas y los agricultores de la cultura Hohokam cavaron más de 800 kilómetros de canales en lo que ahora es el sudoeste de Estados Unidos.

Las ciudades de hoy utilizan carteras de tecnologías para conservar el suministro, desde presas de 60 pisos y productos químicos hasta bombas centrífugas y baños especiales. Y, sin embargo, las ciudades del mañana tendrán que hacer más.

Un reciente informe de la ONU sobre sequía revela que el cambio climático ha aumentando la frecuencia, gravedad y duración de las sequías, que contribuyen a la inseguridad alimentaria, la pobreza y la desigualdad. El informe afirma igualmente que “la sequía ha sido el desencadenante físico de largo plazo del cambio político en 5.000 años de historia humana registrada”. Requiere una acción urgente y una transformación en la gobernanza para manejar el riesgo de sequía moderna de manera más eficaz.

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Se pueden encontrar ejemplos a nivel mundial. En 2018, Ciudad del Cabo, en Sudáfrica, evitó por poco un “Día cero”, cuando los grifos se secaron. Acuíferos indios están desapareciendo rápidamente. El río Colorado, una fuente de agua para 40 millones de personas, está en riesgo por una “megaescasez” que se agrava en el oeste de EE.UU. Para 2050, se estima que la población mundial se acercará a los 10.000 millones, aumentando la demanda de agua en un 55%. Y para entonces, dos tercios de las personas vivirán en ciudades.

“A medida que las ciudades continúan creciendo, tendrán más demanda de agua de muchos sectores: residencial, industrial, ecológico”, dice Enrique Vivoni, hidrólogo de la Universidad Estatal de Arizona. “Los planeadores de ciudades deben pensar en el futuro, y no solo en los próximos 5 a 10 años, sino quizás 50 o 100 años”.

Cada lugar es diferente cuando se trata de prepararse para estos desafíos, pero algunas tácticas son lo suficientemente aplicables a nivel universal como para que se puedan reunir en un proyecto para ciudades inteligentes con respecto al agua del mañana.

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Reciclar agua

Expertos señalan una forma en la que todos en el planeta pueden ahorrar agua: utilizándola más de una vez. Reciclamos plásticos y metales, pero ¿por qué no agua? Dragan Savic, director ejecutivo del Instituto de Investigación del Agua KWR en los Países Bajos, cree que el reciclaje en el hogar es una oportunidad “enorme”. Newsha Ajami, directora de política del agua urbana de la iniciativa Water in the West de la Universidad de Stanford, dice que la reutilización en el sitio es quizás la mejor manera de mejorar la eficiencia.

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“Si pensamos en las ciudades que tenemos en este momento, es más o menos un sistema de un solo uso”, dice Ajami. “Entonces, el agua entra, la usamos una vez y luego sale. Se descarga el inodoro con la misma agua que se bebe, lo cual no es muy eficiente, si pensamos bien”.

Los hogares deberían usar agua muchas veces, según Ajami. Un enfoque de usos múltiples es posible porque varios usos (paisajismo, jardinería y agua de inodoro) no requieren agua potable. Muchas de estas necesidades se pueden satisfacer con aguas grises, es decir, agua reciclada sin residuos. Hasta el 75% del agua doméstica se puede reutilizar como aguas grises.

Datos más precisos sobre el uso del agua también podrían ayudar a la conservación. Con una mejor medición del agua, las personas podrían comprender mejor su uso doméstico, tanto en interiores como en exteriores.

“El agua se mide menos que otros sistemas, como el transporte”, dice Savic de KWR. “Si no se mide, no se puede administrar”.