:quality(75)/cloudfront-us-east-1.images.arcpublishing.com/bloomberglinea/7MRZBG34KJBTHCUOOL5CYZ3NAY.jpg "Un empleado vierte café en una taza.")
Bogotá — Colombia reportó en noviembre una producción de 1,131 millones de sacos de 60 kg de café, lo que supone el resultado más bajo para ese mes desde el 2014 cuando se alcanzaron los 1,115 millones de sacos.
Y en medio de la baja productiva, el consumo interno de café en Colombia habría aumentado a 2,8 kg per cápita este año, según un nuevo estudio de la firma Reinova.
Además, solo en la población mayor de 12 años se estima que el consumo interno per cápita habría aumentado de 2,7 kg a 3,4 kg en el mismo período.
“Las bebidas a base de café alcanzan una participación de 40% sobre el total de consumo de bebidas entre las cuales también se encuentran los jugos, agua, gaseosas, etc.”, según indica la FNC.
Para compensar la caída de la producción y cumplir la demanda interna, Colombia, considerado el tercer productor mundial de grano, también apela a las importaciones.
Hasta junio las importaciones de café en Colombia totalizaron 840.000 sacos de 60 kilos y se espera que estas alcancen los 1,6 millones de sacos al final del año, según cifras compartidas a este medio por el director de investigaciones Económicas de la Federación de Cafeteros de Colombia (FNC), José Leibovich Goldenberg.
La producción de café se ha visto rezagada en el remate del año por factores climáticos y en octubre pasado esta también se contrajo un 13 %, hasta un poco más de 1 millón sacos de 60 kg de café verde.
Así las cosas, la producción de café colombiano se ubicaría por segundo año consecutivo por debajo de los 14 millones de sacos, ya que entre enero y noviembre de este año el país completa 11,192 millones de sacos de 60 kg.
El año pasado en este mismo período el país completaba 12,147 millones de sacos y cerró el 2020 en 13,9 millones de sacos, según cifras de la Federación Nacional de Cafeteros (FNC).
Ver más: Precio interno del café en Colombia marca récord, pero se está lejos de bonanza
En el 2019, la producción de café colombiano cerró en 14,8 millones de sacos de 60 kilos, un 9 % más que en el 2018. En ese entonces, la (FNC) indicó que ese volumen de producción no se registraba desde hace más de 25 años (16,1 millones de sacos en 1992).
Los últimos dos años han estado marcados por el golpe de la pandemia, la alta inflación y la crisis logística que ha retado al sector cafetero en el país.
Ahora, en el remate del año se agrega el factor climático como condimento adicional, luego de que el país viviera durante varios meses un estallido social contra el Gobierno colombiano que también tuvo efectos en la producción. Estos factores provocarán que el sector no pueda aprovechar como debería este aumento presupuestado en el consumo.
En 2021, los meses más pobres en cuanto a producción fueron abril (810.000) y agosto (915.000), aunque en mayo y junio, meses en lo que se vivían los momentos más duros del paro nacional, no hubo dato de producción.
Ver más: ¿Es justo el precio del café para agricultores? Los dilemas detrás del negocio
En noviembre, las exportaciones de café totalizaron 1,1 millones de sacos de 60 kg, lo que supuso una caída de 11% frente a los casi 1,3 millones de sacos vendidos en el exterior en el mismo mes de 2020.
La agremiación indicó que en lo que va corrido del año hasta noviembre las exportaciones “se mantienen estables” alrededor de los 11,2 millones de sacos.
Este año el precio interno del café rompió la barrera de los $2 millones por carga de 125 kilogramos (unos US$510), alcanzando máximos históricos prácticamente semana a semana en el remate del año.
Ver más: Precio del café sube a máximo de siete años por amenazas a suministro mundial
Pero el gerente de la FNC, Roberto Vélez, manifestó que los precios “están lejos de ser de bonanza cafetera”, sino que más bien son “precios remunerativos para una actividad que estuvo prostrada por más de 15 años en materia de rentabilidad”.
