El primer juicio penal contra Donald Trump comenzará el 15 de abril en Nueva York

El retraso se produjo después de que los fiscales federales entregaran nuevos documentos relacionados con una investigación separada sobre el exabogado de Trump

El primer juicio penal contra Donald Trump comenzará el 15 de abril en Nueva York
Por Patricia Hurtado - Erik Larson
25 de marzo, 2024 | 02:44 PM

Bloomberg — Un juez de Nueva York dictaminó que el primer juicio penal de Donald Trump comenzará el 15 de abril en Manhattan, con lo que el caso vuelve a su cauce tras un breve retraso que se produjo cuando aparecieron miles de páginas de nuevas pruebas.

El juez Juan Merchán hizo el anuncio durante una audiencia el lunes ante la mirada del expresidente. La decisión prácticamente garantiza que el juicio sobre el pago de dinero por silencio de Trump a una estrella del porno antes de las elecciones de 2016 irá a un jurado mucho antes de que los votantes acudan a las urnas para las elecciones de noviembre.

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Inicialmente estaba previsto que el juicio comenzara hoy, pero Merchan impuso un aplazamiento de 30 días el 15 de marzo a petición del fiscal del distrito de Manhattan, Alvin Bragg. El retraso se produjo después de que los fiscales federales entregaran nuevos documentos relacionados con una investigación separada sobre el exabogado de Trump, Michael Cohen, quien organizó el pago de dinero por silencio y se espera que sea un testigo clave del gobierno en el juicio.

El presunto candidato republicano a las elecciones presidenciales de noviembre abandonó la sala poco después de que se fijara la fecha del juicio, saludando con el pulgar a los espectadores de la primera fila. Fuera del tribunal, dijo a los periodistas que planea apelar la decisión del juez de fijar el juicio para el próximo mes. Trump había solicitado un aplazamiento más largo, argumentando que el aluvión de pruebas de última hora socavaba su defensa.

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“Este caso debería haberse presentado hace tres años y medio, decidieron esperar ahora justo durante las elecciones, para que no pueda hacer campaña”, dijo Trump. “Voy a apelar”.

El juez también rechazó la petición de Trump de desestimar el caso como consecuencia de las nuevas pruebas. El expresidente había argumentado que los fiscales incurrieron en una mala conducta generalizada al no entregar los documentos antes.

El expresidente se anotó el lunes una importante victoria en un caso de fraude civil no relacionado después de que un tribunal de apelaciones de Nueva York recortara el tamaño de la fianza que debe pagar para dejar en suspenso un veredicto de US$454 millones mientras apela. La decisión de rebajar la fianza a US$175 millones evita a Trump el riesgo de que sus bienes sean embargados por la fiscal general de Nueva York, Letitia James, que presentó la demanda.

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El caso será el primero en ir a juicio, y es uno de los cuatro procesos penales a los que se enfrenta Trump en su campaña para volver a la Casa Blanca en medio de un torrente de desafíos legales. Aún no está claro cuándo comenzarán los otros juicios penales. Trump, el presunto candidato presidencial republicano, ha negado haber cometido irregularidades en todos los casos y ha tachado la acusación de Bragg de “caza de brujas”.

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Bragg acusó a Trump hace casi un año, alegando que el magnate inmobiliario falsificó docenas de registros comerciales para disfrazar un pago a la estrella porno Stormy Daniels para que guardara silencio sobre una supuesta aventura una década antes. Era parte de un supuesto plan para suprimir la publicación de acusaciones salaces y potencialmente perjudiciales de Daniels y otros que amenazaban con dañar su campaña presidencial de 2016.

Cohen se declaró culpable en 2018 de cargos federales de financiación de campaña e impuestos vinculados a los pagos de dinero por silencio. En ese momento, los fiscales dijeron que Cohen pagó a una estrella porno US$130.000 para comprar su silencio sobre un encuentro sexual con Trump una década antes. EE.UU. dijo que el pago se hizo con el conocimiento de Trump, pero no lo acusó porque el Departamento de Justicia sostuvo que un presidente en ejercicio no podía ser acusado.

La acusación estatal de Bragg desvelada el pasado abril alegaba que Trump falsificó los registros comerciales de su empresa al afirmar que reembolsó a Cohen por el trabajo legal para ocultar la verdadera naturaleza de los pagos de dinero por silencio.

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